Una buena ficha de producto es esencial para vender online. Es igual que un escaparate en una tienda física: a nadie se le ocurriría tener los productos tirados por el suelo, sin el precio puesto y/o desordenados. Sin embargo, es muy común descuidar la ficha de producto en una tienda online.
La mayoría de las empresas están lanzándose al mundo del comercio electrónico para acabar descubriendo que eso de vender online no es tan fácil como parecía. Tener un buen producto solo no vale, hay que conseguir que el público lo vea y decida comprarlo en vez de a la competencia. Para eso es esencial tener una buena ficha de producto.
Google Shopping es un comparador de productos con un funcionamiento parecido al de otros comparadores como Twenga, Shoppydoo o Kelkoo. No son tiendas online propiamente dichas, sino plataformas donde los anunciantes suben su catálogo de productos a modo de escaparate. Cuando un usuario hace una búsqueda en Google, le sale el producto que quiere comprar, con un listado de todas las tiendas online que lo hayan subido a la plataforma. Por eso es un comparador: nos permite comparar el mismo producto entre las diferentes tiendas que lo distribuyen. De este modo queda en nuestras manos el decidir dónde hacemos finalmente el pedido.
En Shopping, como en toda tienda online, tu ficha de producto tiene que estar perfecta, de manera que quien la vea se decida por comprarte el producto a ti en vez de a la competencia. Al tratarse de un comparador, en la decisión de compra siempre van a intervenir muchos más factores, como el precio, el plazo de envío, la confianza de la tienda… Todos ellos hay que tenerlos en cuenta todos a la hora de plantear nuestra estrategia en Google Shopping, pero siempre con la ficha de producto como base, ya que es donde va a aterrizar un usuario interesado.
Las 7 claves de una buena ficha de producto
Ejemplo ficticio de ficha de producto en Google Shopping[/caption]
1. El título
Cuando un usuario hace una búsqueda en Google, lo primero que va a ver en los resultados de Shopping es el título de los productos. Por eso tiene que ser lo más descriptivo posible e incluir, a ser posible, la palabra clave. Por ejemplo, ante una búsqueda de “Comprar gafas de sol Rayban”, un buen título de producto sería “Gafas de sol Ray-Ban modelo Aviator color rosa”. Con esto ya le estás diciendo al usuario qué ofreces, con lo que si hace clic es que ya está interesado.
Es importante no añadir en el título ningún texto promocional como “Envío gratuito” o “Dos por uno”, ya que Google penaliza este tipo de acciones.
2. La imagen
Lo primero que lee un usuario en Shopping es el título, pero lo primero que ve es la imagen del producto. Tener imágenes cuidadas, con fondo blanco y una buena perspectiva del producto es casi tan importante como tener un buen precio.
Además, Google Shopping también te da la opción de incluir imágenes complementarias, lo cual es altamente recomendable para dar al usuario toda la información posible. Queremos que cuando haga clic en tu producto ya haya decidido comprarlo y vaya directo al carrito de la compra.
3. La descripción
Piensa que en una tienda online no tienes un dependiente que le cuente las maravillas de tu producto al posible cliente. La descripción tiene que ser lo más detallada posible, sin dejar una sola duda a quien la lea. No sólo tienes que describir tu producto, tienes que explicar por qué es mejor y por qué tiene que comprar ese y no otro, es decir, incluir la ventaja competitiva.
Ten en cuenta que tu producto va a aparecer sepultado entre otras múltiples opciones y otros tantos vendedores. Es tu oportunidad para convencer al usuario de que te compre a ti.
Además, Google tiene en cuenta la descripción a la hora de mostrar los resultados de búsqueda. Por eso es muy recomendable introducir en ella palabras clave y atributos del producto como color, textura o diseño, ya que es probable que un usuario haga una búsqueda con ellos.
El propio Google recomienda a los anunciantes descripciones de entre 500 y 1000 caracteres, aunque tienes hueco para completar hasta 5000.
4. El precio
Shopping va a sacar siempre primero la opción más barata (incluyendo los gastos de envío) dentro de un mismo modelo. Esto no significa que porque tengas el precio más barato vayas a vender más. Si no tienes una buena ficha de producto que le acompañe, los usuarios se van a ir al resto de vendedores que les ofrecen una mayor confianza y seguridad.
Ten en cuenta que el precio que se muestre tiene que llevar añadido el IVA. Google especifica en qué países esto es obligatorio y en cuáles no.
5. La categorización de los productos
Para facilitar que los usuarios interesados encuentren nuestros productos, tenemos que tenerlos bien categorizados, tanto a nivel interno de nuestra propia tienda online, como a nivel de Google. Para ello el buscador tiene una "taxonomía de productos" formada por un árbol de categorías que tendremos que asignar a nuestros productos. Por ejemplo, si vendemos cámaras de vídeo, la categoría de Google del producto sería: Cámaras y ópticas > Cámaras > Cámaras de vídeo. Esto ayuda a que Google estructure nuestro catálogo y sólo muestre nuestros productos a los usuarios interesados.
6. Las condiciones de envío
Cuando entras en una ficha de producto de Google Shopping hay una pestañita que te permite filtrar todas aquellas tiendas que no tengan el envío gratuito. Por una tontería así de repente te quedas fuera de la vista del usuario.
Tampoco quiero decir que haya que poner siempre envío gratuito. Dependerá de tu estrategia, sector, competencia y muchos factores más.
7. La disponibilidad
Es muy importante indicar la disponibilidad que tienen nuestros productos, es decir, si los tenemos actualmente en stock y pueden ser enviados según el usuario haga el pedido, o si van a tardar un poco más porque se encuentren agotados. Por eso es importante incluir también el tiempo de entrega estimado del pedido.
Cuando indicamos a Google que un producto está fuera de stock, éste deja de mostrarlo automáticamente hasta que se le vuelve a indicar que ya está disponible.
Cuando ya tenemos la ficha de producto en Google Shopping a punto, es mucho más probable que los usuarios hagan clic en ella. Cuando esto ocurre, el usuario es directamente redirigido a tu tienda, no se puede comprar el producto en Google. Por eso es muy importante que tengas la ficha de destino tan cuidada como la de Shopping. Será en ella donde el usuario tome la última decisión de compra y presione el botón “Comprar”.
¿Se te ocurren otros detalles que sea importante cuidar en una ficha de producto? ¡Cuéntamelo en los comentarios!
Imagen de cabecera cortesía de Shutterstock.