La multinacional Adobe ha realizado una encuesta internacional, que demuestra la velocidad de implantación del marketing digital en el mundo y las dificultades de adaptación que el fenómeno está acarreando en empresas y a directivos del sector. El 76 por ciento de éstos considera que la disciplina ha evolucionado más en los dos últimos años que en los cincuenta anteriores.
La confianza de los directivos de marketing en sus propias capacidades digitales es discreta, por no decir escasa. Sólo el 48 por ciento de ellos se siente altamente competente en el ámbito digital. Además, tan solo el 40 por ciento califica como eficaz la estrategia de mercadeo de sus empresas. El resto, parece ser, tiene escasa fe en el rendimiento del marketing en sus compañías. Únicamente uno de cada tres profesionales afirma que las acciones digitales de su organización resultaron un éxito.
La mayoría de los directivos de marketing encuestados piensan que éste tiene valor y que puede medirse. Sin embargo, no se ponen de acuerdo sobre los ámbitos que tendrán más importancia en los tres próximos años. Un 13 por ciento se decanta por el social media marketing, un 8 por ciento opta por el e-commerce y un 5 por ciento elige el marketing de contenidos, por ejemplo.
Todas estas cifras parecen lógicas, si tenemos en cuenta el enorme salto experimentado por el marketing en los últimos años. Pensemos que las bases del mercadeo tradicional se tambalean, si no han desaparecido ya. Las grandes campañas publicitarias, dirigidas a la gran masa, han perdido la corona en el reino del marketing en favor de la bidireccionalidad, la interacción y la suprema satisfacción de las necesidades y anhelos del target.
El público desea, cada vez con mayor ahínco, acceder a la información y conocer las últimas novedades del mercado. Las plataformas sociales le permiten lograr tales objetivos y las empresas y los directivos han de saber hacer frente a estos retos y al nuevo contexto en el que se desenvuelve el marketing del siglo XXI.
Los directivos de marketing deberían reciclarse y conocer las nuevas reglas de juego para continuar la partida. Deberían hacerlo, no sólo por adaptarse al nuevo marketing digital, también para optimizar el empleo de las técnicas tradicionales. No en vano, las nuevas tecnologías, Internet y las redes sociales ayudan a identificar y a conocer más profundamente al target.
La encuesta de Adobe se realizó a 1000 profesionales del marketing, entre el 26 de agosto y el 11 de septiembre de 2013.