Hace unos años Google decidió hacernos la vida más fácil a los que nos dedicamos al marketing online presentando una nueva herramienta: el Google Tag Manager. Una herramienta que permite gestionar de forma fácil y rápida el seguimiento de eventos de una página web.
Todavía hay pocas empresas en España que utilizan esta herramienta a pesar de todas sus ventajas. En este post te explico qué es y por qué debes pasarte al Google Tag Manager si te dedicas al mundo del marketing online y la analítica web, ¿quieres saber más?
Qué es el Google Tag Manager
Se trata de un “contenedor” (en Google lo llaman container) capaz de agrupar las etiquetas de seguimiento de campañas y herramientas en un mismo sitio o trozo de código. Es una explicación muy sencilla en la que no me he querido meter en temas de código porque, precisamente, una de las grandes ventajas del Google Tag Manager es que no necesitas ser programador para usarlo.
Dicho de otra manera, todas las etiquetas de seguimiento de conversiones de Adwords, Remarketing, Analytics… en vez de tener que ponerlas en el código de la página una a una cada vez que las actives, puedes tenerlas todas agrupadas dentro del Google Tag Manager y añadirlas y quitarlas siempre que quieras sin necesidad de acceder al código HTML.
Lo que ves en la imagen es el panel de control de una campaña de ejemplo en el Tag Manager. Como ves, en ese "contenedor" hemos metido etiquetas de conversiones de , la etiqueta de remarketing de la campaña y la etiqueta de seguimiento de . Desde ahí podremos gestionar estas etiquetas, añadir nuevas cuando sea necesario y eliminar aquellas que no se vayan a usar más.
Las ventajas de usar el Google Tag Manager
Como ya habrás podido intuir, el Google Tag Manager puede suponernos muchas facilidades a la hora de gestionar el seguimiento de nuestras páginas web. Éstas son sólo algunas de ellas:
- Ahorro de tiempo. Por varios motivos. En primer lugar, no tendrás que hablar con el departamento de IT cada vez que queramos dar de alta un nuevo código de seguimiento. Podrás meterte tú mismo en el panel de control y activar en un momento todas las que quieras. Por otro lado, te permite gestionar todas las etiquetas desde un mismo lugar, facilitándote mucho la tarea de hacer cambios o revisar el funcionamiento.
- Fácil de usar. Muchas personas no usan esta herramienta por miedo a su dificultad. Es verdad que de primeras parece poco accesible, pero según vayas cogiendo práctica con ella te irás dando cuenta de que en realidad es muy intuitiva. Si ya tienes experiencia con otros productos de Google no tendrás ningún problema a la hora de usarla.
- Acorta el código de tu página. Esto es muy bueno por motivos de SEO, ya que un código muy extenso suele suponer una menor velocidad de carga de la página y hasta puede que Google te penalice por tener un ratio de texto y HTML muy alto (es decir, mucho más código que texto).
Los primeros pasos en el uso del Google Tag Manager
Como te decía, no hace falta entender de código para usar esta herramienta. Una vez la tengamos instalada en nuestra web ya podemos gestionarla a través del panel de control de Google. Al crear una nueva cuenta en Google Tag Manager, éste nos va a realizar una serie de preguntas sobre la web en la que queremos incluir la herramienta e, inmediatamente, nos va a dar el código de instalación.
Para instalarla en nuestra página, simplemente hay que añadir el código justo después de la apertura de la etiqueta <body>. Si no entiendes de programación le puedes enviar la etiqueta y las instrucciones a tu webmaster.
Una vez instalada, nos olvidamos del código y vamos al panel de control del Google Tag Manager que es el sitio desde el que vamos a controlar a partir de ahora la mayoría de las etiquetas que queramos añadir a nuestra web. Esta herramienta tiene una filosofía similar a Google Analytics. Es decir, podemos tener varias cuentas diferentes con varios contenedores cada una. Por ejemplo, yo puedo tener la cuenta Websa100 y dentro de ella un contenedor para el blog y otro para la página web. Pero, además, como trabajo con clientes, puedo tener una cuenta aparte para cada uno de ellos que voy a manejar desde el mismo sitio. Igual que en la mayoría de los productos de Google, puedo dar acceso a diferentes usuarios con distintos tipos de permiso para que trabajen en la herramienta.
Con esto ya estaríamos listos para empezar a usar nuestro Google tag Manager pero, ¿cómo se "da de alta" una nueva etiqueta? Tranquilo, es más sencillo de lo que parece. Tienes que entrar en el apartado de "Tags" y darle a "new". Una vez ahí tienes que elegir de dónde es tu etiqueta. Ahora mismo Google nos deja elegir entre varios sitios o poner nuestro propio código HTML (para usuarios más avanzados en esto del código):
Para configurar la etiqueta sólo tienes que seguir las instrucciones que te va dando Google y seleccionar dónde se va a "disparar" (Fire On), es decir, en una página, un botón, un formulario... Según tu etiqueta a lo mejor necesitas configurar los "triggers" o los eventos que van a producir que salte el seguimiento como cuando un usuario llega a una página concreta (la página de gracias de después de comprar, por ejemplo) o hace una acción específica en tu web que quieras medir (como visitar una página concreta durante un tiempo determinado).
Para aprender a usar esta herramienta con mayor profundidad, te recomiendo que le eches un ojo al curso de Google Tag Manager Fundamentals que te explicará los conceptos básicos y te ayudará a empezar a usarla. Si todavía no la has probado es el momento de que te atrevas con ella. Verás como la implementación de etiquetas y códigos de conversión se convierte en una tarea mucho más sencilla.
Imagen de cabecera cortesía de Shutterstock.